Los reporteros de "A Fondo" de Antena3 realizaron hace unos días un reportaje sobre los Agentes de la Policía Científica del CNP.
El trabajo de la Policía Científica
La Policía Científica se ocupa cada año de unos 3.000 casos. Su trabajo consiste en buscar las pruebas que los delincuentes suelen dejar en la escena del crimen. Los reporteros de "A Fondo" han comprobado cómo arranca una investigación policial.
Tras localizar un coche en un parking es de un delincuente, al que todavía no han identificado. Agentes de la unidad científica lo van a inspeccionar meticulosamente. Buscan pelos, huellas, restos de sangre, de ADN, cualquier cosa que sirva para poner un nombre y un rostro.
Además de huellas, restos capilares, en la guantera se ha encontrado un revolver en una bolsa de plástico, y pañuelos de papel usados. Material suficiente para que trabaje el laboratorio y para poner un propietario a estas pertenencias.
Los objetos se introducen en un dispositivo, conocido como La Campana. Tras 30 minutos bajo la emisión de gases, se capturan las huellas dactilares.
Un pañuelo de papel sucio y usado, tratado de forma adecuada se convierte en un libro con la historia criminal escrita involuntariamente.
Un revólver, del calibre 38, es disparado en la galería de tiro. Cada arma, aunque sea de la misma marca y modelo, dispara de manera diferente. Los proyectiles y los casquillos se quedan dañados siempre de la misma forma. Esto vale, para que se descubra en que delitos, ese revólver ha participado.
Las huellas dactilares, dan su fruto, se cotejan con la de los dos millones de detenidos en España y que están informatizadas. Si el sospechoso ha sido fichado, ya se tiene un nombre.
La evolución de la investigación científica ha sido espectacular. Uno de los mayores avances ha sido el llamado Luminol. Desde hace diez años en España, esta sustancia sirve para descubrir restos de sangre en cualquier lugar y superficie, por mucho que se hayan intentado limpiar las manchas, éstas son descubiertas.
Cada año en la unidad de policía científica, entran más de 2.600 casos. Delitos a la espera de resolución, donde solo la ciencia y el laboratorio pueden tener éxito.
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